EE. UU., 1992
Duración: 90′
Dirección: John Musker, Ron Clements
Idioma: doblada en español
Nuevamente, Ashman y Menken logran utilizar el musical y la imaginación desbordante para crear dentro de un género, en este caso el cine de aventuras, que gana en plasticidad gracias al poder de la animación. Pero hay otro elemento en esta comedia vertiginosa que le otorga un poder enorme: la complementación entre el arte de los dibujantes, y la potencia para improvisar y crear de Robin Williams, el comediante que da voz en el original al Genio. Cada una de sus apariciones parece un concierto entre la velocidad para jugar con las palabras del guión y la inventiva de los dibujantes no por “ilustrar” el humor, sino por complementarlo, darle una potencia mayor. El resultado es impactante y no ha perdido una pizca de su fuerza cómica. Más allá de ser, por cierto, una parábola sobre el poder y su ejercicio, sobre las responsabilidades y los deseos, un cuento sobre qué significa la fidelidad a sí mismo y la libertad.